Una alimentación balanceada rica en todo tipo de nutrientes es una de las claves esenciales de un embarazo sano, además del ejercicio. En el embarazo, la mujer necesita una dosis de hierro más elevada de la que normalmente requiere. El hierro es necesario para la producción de la hemoglobina en las células rojas de la sangre materna y fetal, una proteína encargada de llevar el oxígeno de los pulmones al resto de las células del cuerpo.